Soy, no existo.
Soy lo que escucho.
lo que veo.
Soy las personas con las que hablo, los extraños, los conocidos, los amados, los traicionados.
El terreno vacío, la grieta en el concreto.
Esa adolescente que llega a casa apestando a marihuana y se persina antes de dormir.
Un libro maltratado, una recomendación, un insulto, el sabor de una lágrima, el maquillaje en la almohada.
Soy un bostezo, una mirada cansada.
Soy celos y rabia, despecho y venganza.
Una felicitación atrasada que hubieras preferido que nunca llegara.
La espera, el escalofrío que llega hasta tus dedos, el estómago revuelto, el nudo en la garganta.
Soy la materia reprobada, el sabor, el aroma grabado en la memoria.
Soy el dolor a carcajadas.
Voy siendo todo, menos yo.
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